Hoy, a la salida del cole, vino a jugar con Anna Tyson. Tyson es el alfa macho de la clase, divino crío, fuerte y gracioso, se conocen desde que la guarde.
Es la primera vez que viene un nene a jugar a casa. A las nenas las tengo controladas; los juegos abajo, la merienda, una peli y juego en la sala de juegos y listo el pollo, están hechas. Pero nunca lo había hecho con un nene, y menos con un super nene. Y la verdad es que fue maravilloso.
Para empezar Anna se rió a carcajadas durante toda la tarde. Con Maddy siempre terminan en una guerra de reinas insoportable, y como Maddy es más fuerte que Anna, Anna en general termina llorando. Acá no había territorios comunes, sino que jugaban y dios mío como se divertían. Tyson agarró el scooter y empezó a hacer saltos sobre una rampita. Volaba y se caía a cada rato, lo que era festejado por Anna (primeras incursiones en el flirteo! Habia que verla hoy en la cena dibujando corazones!!!!!!!!!!!!). En una de las caída viene Tyson y me dice: I bumped my nuts (me golpee las nueces? no es huevos, no es cojones, no es pelotas, ni mucho menos testículos... es menos fuerte) y se partía de risa.
Jugaron a trepar a todo lo que pudieron, a esconderse en todos los armarios y cómodas a medio restaurar. Treparon a un cocotero (no muy alto, porque sino me infarto) y jugaron al frizby. Anduvieron en bici. Tyson la llevó primero a Anna y después a Olivia en un triciclo con acoplado. Tomaron la leche, comieron media nevera, volvieron a jugar. A las 5 la mamá lo vino a buscar. Trudi tiene unos 24 años (hay gente que tiene esas edades!). Tiene a Blaise, que es un nene de 4 que hizo buenas migas con livi y está embarazada de una nena. Tomamos un te ella y un café yo mientras los cuatro enanos jugaban en el sleep out con los little people. Trudi trabaja para el Base Hospital, como ayudante del doctor Antonio Vega Vega. Y si... es español! No me lo podía creer. Yo había oido hablar de un español en rocky, esas cosas que llegan (creo que me lo dijo una medica mientras me espachurraban una teta) pero no presté demasiada atención. Y mira por donde, es el jefe de Trudi.
Paco andaba como loco porque fue la primera vez en el día que algo le divirtió. O en las semana.
El lunes por la mañana amaneció Enzo medio raro. Tenía fiebre y andaba tiritando y tenía tos. Le dimos ibuprofeno y la fiebre le bajó pero por la tarde estaba otra vez mal así que lo llevamos al vet. Una indecente cantidad de dinero después, un paquete de antibióticos y un analgésico (que podría haber sido ibuprofeno que vale 1/10) después volvimos a casa en la esperanza de que esto pasaría.
El lunes a la noche estuvo bien, el martes regular, y anoche mal. Estaba tirado en la alfombra templando, y me pasé media noche con él, lo tapé y durmió un poco pero poco. Esta mañana estaba dolorido, caminaba pero con dificultad, veías que estaba sufriendo, así que doug lo llevó al vet mientras yo llevaba a las chicas al cole y a la guarde andando.
Lo dejaron en observación en el hospital perruno, y mañana a la mañana lo tenemos que ir a buscar. Le hicieron unos análisis de sangre y tendrán los resultados del lab a primera hora. Me llamaron hace un rato diciendo que está super alerta, y parecería estar bien, luego de haberle puesto otro tipo de antibióticos (el anterior era amoxicilina) intravenoso. En todo caso, nos dijeron que no creían que fuera algo de vida o muerte.
Para esto, yo lloraba sentada en la silla, y doug me miraba horrorizado, diciéndome que no podía estar llorando porque el perro tiene un resfrío o una gastroenteritis. Pero el se olvidó que cuando las chicas eran bebés, cuando se enfermaban yo también lloraba, porque no soporto esa cosa de confiar en alguien para que adivine, porque el animal (o el crío) no puede decirte donde les duele.
Paco perdido, solo cuando los chicos correteaban pareció despertar de un día totalmente aletargado.
Ayer estuve en casa de Tiffany tomando un café. En cualquier momento voy a tener que empezar a rechazar citas. Mañana tengo otro morning tea en casa de Shay, que celebra que trabaja un día menos a la semana, y es una especie de despedida para Tami, que a mi ni me va ni me viene, pero que no importa, que más dá que me da lo mismo.
Ya me veo conociendo a estos médicos españoles, y haciendo paella los domingos.
cambia. todo cambia.
1 comentario:
Cambia, todo cambia. Que bueno!! Me alegro que tengas la agenda llena, que te toque rechazar citas, que llorés cuando el rope se enferma, que mañana lo vayas a buscar y ya esté bien, que la nena se te enamore, que tengas lindos días.
Besos romanos
Vale
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