viernes, 31 de agosto de 2007

de la tierra a la luna



Tanta luna y tanto eclipse anoche tuve una pesadilla
soñé que abría la ventana para sacarle una foto al cielo, como hago todos los días, y veía el cielo negro. Total y absolutamente negro. Y ahí, enorme, la tierra, azul y blanca. Y la oscuridad era total, y se acercaba.
Era el fin del mundo. Y yo me volvía adentro de casa, cerraba la ventana, y lo llamaba a papá, aterrada.
No creo que haya llamado a mi padre asustada desde hace, por lo menos 35 años. Por qué lo llamé a él ni idea, y dudo si escribir esto o no porque ya me veo venir las interpretaciones metalógicas, pero ahí está.
Lo que sentía en el sueño era el terror más absoluto. No creo que haya sentido yo un terror más grande. La oscuridad acercándose. El fin del mundo. Nada que mover o tocar. Sin solución.
Como nota colorista de mi sueño, aparecían coches volcados y camiones, y había muchos muebles tirados, y yo pensaba... que sentido tiene llevarme estos muebles a casa ahora...
que desperdicio!.

un espanto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

los sueños sueños son